Viviendas

Expertos: alquileres nuevos altos perjudican crecimiento económico alemán

13.10.2025, 13:16

El aumento constante de los alquileres de viviendas en Alemania no solo afecta a los habitantes de las grandes ciudades, sino también a la economía, declaró hoy Oliver Falck, del instituto de investigación económica Ifo, con sede en Múnich.

"Si los trabajadores ya no pueden permitirse vivir en las metrópolis, las ciudades pierden fuerza económica", explicó Falck.

El experto calculó junto con otros investigadores que los nuevos contratos de alquiler en las siete ciudades más grandes de Alemania son, de media, un 48 % más caros que los contratos existentes. Esto supone 4,48 euros (5,20 dólares) por metro cuadrado.

La diferencia es especialmente grande en Berlín, con alrededor del 70 %, seguida de Múnich, con el 45 %, y Hamburgo, con el 37 %. En Colonia, Fráncfort, Stuttgart y Düsseldorf, los recargos oscilan entre el 30 % y el 36 %.

Los alquileres de los nuevos contratos han aumentado alrededor de tres cuartas partes desde 2013, mientras que los de los contratos existentes solo subieron moderadamente.

"Esta evolución amenaza con convertirse en un problema social y en un obstáculo para el crecimiento de las ciudades", alertó Falck.

Simon Krause, coautor del estudio, describió con más detalle la "brecha" en el mercado inmobiliario: "Mientras que los inquilinos se benefician de precios regulados y estables, quienes buscan vivienda pagan alquileres considerablemente más altos en los nuevos contratos".

"Esto puede suponer una diferencia de varios cientos de euros para viviendas de la misma ubicación y tamaño, lo que convierte el mercado inmobiliario en una lotería", añadió.

Esto también tiene consecuencias en la carga que supone el alquiler para los hogares. Según el Ifo, en el caso de los alquileres existentes, esta carga se mantuvo estable durante años en torno al 35 % de los ingresos de los hogares con bajos ingresos.

En el caso de los nuevos alquileres, esta cifra alcanza ahora casi el 50 % en las grandes ciudades, añade el informe.

"Dada la gran diferencia entre el alquiler de los contratos existentes y los nuevos, la gente prefiere quedarse en sus viviendas baratas, aunque ya no se adapten a su situación vital. Esto reduce la movilidad de las personas y afecta a su disponibilidad para el mercado laboral", comentó a su vez Pascal Zamorski, otro de los coautores.

Los investigadores consideran que la solución pasa por el plano político, que debe centrarse más en la oferta y utilizar las viviendas disponibles de forma más eficiente.

Para ello, subrayaron que es fundamental reducir los costes de construcción y de compra o venta, agilizar los permisos y promover de forma específica las viviendas asequibles.

Los expertos indicaron que la regulación de los precios de los alquileres puede tener un efecto moderador, pero no resuelve el problema de la escasez de viviendas.

El Ifo no es el único que llega a esta conclusión. Hace solo una semana, el Instituto Pestel de Hannover presentó un análisis similar.

"La rigidez de los mercados inmobiliarios conduce, naturalmente, a la rigidez de los mercados laborales, porque la gente ya no puede mudarse para aceptar puestos de trabajo en otras regiones", afirmó Matthias Günther, economista jefe de Pestel, en la inauguración de la feria inmobiliaria Expo Real de Múnich. "La solución de la cuestión de la vivienda es un requisito previo para el desarrollo económico", enfatizó.